Uf! Querría haber comenzado este artículo con una foto de un tatoo de esos que llevan los marineros de "AMOR DE MADRE", pero con las cosas que hay en internet, sólo he conseguido una angustia existencial que no se me va a quitar hasta que mis chicos cumplan... 40, y ya no les valga la pena hacerse un tatuaje, porque... madre mía! No sabía que se podía tatuar la lengua! O el blanco de los ojos... Me dan escalofríos, y todo... Dejaremos estos análisis para otro momento pues por lo que veo, hasta me dará para un artículo de opinión.
Quisiera que se entendiera por qué lo llamo Passión de Madre, con dos eses, si, porque sólo ese sentimiento profundamente arraigado, PASSIÓN, puede llevar a esta madre a la playa con las dos fieras estas que tengo por hijos.
Ir a la playa, como muchos (espero) que tengan niños sabrán, puede llegar a ser un verdadero desafío físico, y a veces incluso intelectual, porque hay que calcular la resistencia de los distintos elementos para poder transportar todo de la forma más eficaz posible. Como esto ha sonado raro, e indicando ya de antemano que a la playa bajamos seis adultos (abuelos más dos parejas de papás) y sólo tres niños, quizá se entienda mejor si paso a enumerar los "achiperres" (palabra leonesa que se refiere a esos objetos sin una utilidad muy definida, que están por todas partes: trastos, cachivaches, etc., a mí me gusta esta palabra porque es muy sonora, parece un compendio entre un estornudo y un pedo, con perdón). Declaro que este nombre no está reconocido en la R.A.E. Ahora sigo con la lista:
- 3 sombrillas (para que todos nuestros bultos, todos nosotros y todo transeúnte que transite por la playa se cobije del arduo sol de las playas gaditanas...)
- 5 sillas; mi culo está siempre en el agua, para qué cargar con una más?
- 1 cochecito de Carla con Carla dentro
- 1 bolsa gigante con los cacharritos de la playa (sólo juegan con una cubo y una pala, pero lo llevamos todo por si aparecen de golpe todos sus compañeros del colegio junto con tooooodos sus amiguitos de Madrid...). Ah! Las palitas son de jardinero de hierro, si, porque de las otras no había en el chino, que todo hay que explicarlo, Dani...
- 2 coladores para coger "caramones" y "candrejoz" en la playa
- 1 chaleco salvavidas "amadrillo" para Jaime
- 1 bolsa con las diez toallas y bañadores de repuesto para los niños, no vayan a coger frío con la terrible temperatura de 32ºC (ya se sabe que pocos pingüinos sobreviven a estas temperaturas...)
- 1 tabla de surf de 2 metros, porque la de uno y medio se nos hacía pequeña...
- 1 bolsa con la comida y la bebida (no es cuestión que nos coman las fieras si no "tenemo argo de comé")
- 1 tabla de surf pequeña para Jaime
- 1 colchoneta
- 3 bolsos de mano (uno por cada mujer)
- 1 mochila de Luis perfectamente equipada para hacer un transplante de corazón debajo de la sombrilla (nunca se sabe qué puede pasar en la playa)
- Una tienda de campaña para que Carla se tumbe sin llenarse de arena
- Ah! Cinco botes de crema solar. Uno de 50 para mis niños, otro de "fus-fús" para la cara de los niños, uno de pantalla total para la niña, otro de factor 10 para mi hermana porque quiere ponerse morena, y otro de 25 para mi para que no me salgan todas las arrugas este año de golpe en la playa
Qué?!? Es o no es un reto ir a la playa arrastrando la vida entre las sombrillas bajo la mirada de los incrédulos espectadores? Y eso si no hay que llevar a uno de los niños en brazos, porque se está achicharrando los pies con la arena, o a los dos porque "Jaime siempre tiene suerte y yo nada, a quemarme!".
A veces creo que los discos de mi columna vertebral deben ser extraplanos, como las compresas, y estar todos unidos formando un conglomerado vertebral que llevará, con los años, a la aparición de una nueva especie: "homo-mamis-bestiajus", o algo así, que será un ser capaz de transportar diez veces su peso, como las hormigas, y con una potencia de voz otras diez veces superior a la del hombre actual... "JAIME Y LUISETE! OS QUEDÁIS AQUÍ! NO VUELVO A DECIROS QUE VENGÁIS NI UNA VEZ MÁS!!!"
El primer día que nos bañamos en la playa, Jaime iba con precaución, se ponía histérico si no estaba yo a su lado, no quería báñarse más que conmigo o con su padre... en fin, las cosas normales de un niño que no sabe nadar y se enfrenta al mar, no? Bueno, hacia el final de esta primera sesión playera ya apuntaba maneras, pues aguantaba él solo al bordecito, saltando las olas... todavía no era muy inquietante.
El segundo día según aterrizamos se largó a saltar las olas, y cuando después de un buen susto con revolcón incluido, vimos que se levantaba escupiendo muerto de la risa, salí corriendo (casi empujada por Luis) a buscar algo que evitase que se ahogara y reprochándome todo el camino el tremendo error que supuso no llevarle a clases de natación en Abril o Mayo. A veces soy demasiado vaga.
En "los chinos", pues en realidad era lo que más cerca tenía, me solucionaron el problema de una forma sorprendéntemente económica: por dos euros con cincuenta céntimos me vendieron una especie de chaleco salvavidas amarillo hinchable, con unos lazos para abrocharlo, que funciona de una forma muy eficiente. Haga lo que haga el niño, no sólo se mantiene a flote, sino que encima la cabeza permanece fuera!
Esto nos dejó a todos un poco más tranquilitos, claro, porque por lo menos nos podíamos bañar... con relativa paz. En todo momento me venía a la cabeza un muñeco que tenía de pequeña que se llamaba "tentetieso", porque eso era lo que hacía Jaimito todo el tiempo. Decía: "mamá, me voy a laz pdofundidadez con laz olaz..."
Luisete es bastante más prudente que su hermano, pero no todo lo que a nosotros nos gustaría, me temo. Él se acordaba todo el tiempo de su primo Lucas, al que habían picado una medusa el año pasado, en Guardamar. Y tuvo la suerte de que su muslo encontrase a la única que flotaba en todo Cádiz. Qué le vamos a hacer! Ha salido a su padre, le pica hasta la Abeja Maya... cómo gritaba! Se pasó toda la tarde agarrado al AFTERBITE! A mi sólo me rozó, y es como si te clavases una agujita... imagino lo que debía dolerle, al pobre! Nos dijo que no pensaba bañarse nunca más en toda su vida. Yo me devané la cabeza buscando la forma de convencerle sin presionarle para que no se quedase con el miedo. Voy a acabar en el infierno de tanto mentir, lo sé... le explique que las medusas te pican sólo una o ninguna veces al año, por lo que si ya le habían picado, este año no le tocaba más. Funcionó.
Bueno, a pesar de todo, este ha sido uno de los veranos más divertidos de mi vida. Ir con los niños a la playa, saltar entre las olas, verles construir con su abuelo el "Atolón del Mururoa" es uno de mis deportes favoritos! Gracias, abuelos!
Historias habituales en la vida de una madre, trabajadora, esposa, mujer, amiga... vamos, lo que me dé. Ex-Ingeniero de Caminos convertida en Profesora de Mates de secundaria en UK.
¿DE QUÉ VA TODO ESTO?
Tras años mandando batallas a mis familiares y/o amigos, tras miles de intentos por mi parte de tener un sitio donde compartir mi humor corrosivo y ácido sin obtener frutos, tras rogar, pedir por las buenas, pedir por las malas, llorar y hacer todo lo que se me ha ocurrido... por fin he conseguido tener un blog! Preparaos...
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Yo, y queriais que yo fuera a la playa. Imaginate con otros 4 ninos mas en la playa!!, necesitariamos un autobus para cargar todo y aun asi se nos olvidaria algo!!!. Hablando de las jelly fish que picaron a Lucas, hace 3 dias me pico una abispa 2 veces!!!, no veas lo que duele!!!, y sabes donde?, tendo que ser la mas desafortunada de toda persona que la hayan picado, me pico la cabrona en la tripa y en la espalda!!!!, se ma habia metido debajo del jersey!!
ResponderEliminarTe pudo picar un aBejorro, so Burra, si quieres, una aBispa, como no fuese un oBispo descarriado, lo dudo mucho!
ResponderEliminarTú eras de ciencias, verdad?
Te recomiendo una visita a alguna playa del Levante en epoca no estival, Leti en serio, he visto yo algún "Ingeniero" ya de edad que se ha preparado un "ACHIPERRE" para transportar todo lo que has indicado que alucinas, verdaderas maquinarias manuales para acercar al borde de la playa todo lo necesario para pasar el día y con el minimo esfuerzo, eso si, todo construido con material reciclado, ya te digo, por cierto no se lo comentes a tu padre no vaya a pasar lo que comentaste que paso en Carabaña con uno de sus inventos.
ResponderEliminarP.D. D. Pedro por si lee esto, no me lo tome a mal, es su hija la que saca informacion y da donde más duele.